Un camino con suerte
Él está acostumbrado que todos le griten con ese sobrenombre, que muy bien lo representa: Pitbull. Sin embargo, este feroz canino, lleva muy orgulloso su verdadero nombre Iván Max Iberico Celis.
El Pitbull es innato de Breña, nació en el Hospital del niño el 12 de junio de 1978, junto con su hermano gemelo Héctor Max. Y desde ese momento su destino ya estaba escrito, ser un grande en el deporte, así como su abuelo Maximiliano Iberico (boxeador profesional), como su padre David Iberico que practicaba lucha olímpica y sus primos, los atletas profesionales.
Cuando Iván tenía 12 años, las cosas en el barrio Aguarico eran muy difíciles, tenías que saber pelear para defenderte y tenías que ser persistentes para no caer en la tentación de las drogas. Es por ese motivo que su madre decide llevarlo a la Federación de Karate, donde lo practica como dos años.
A los 15 años, su padre lo lleva a presenciar un encuentro en la Federación de lucha Olímpica, fue como amor a primera vista porque al día siguiente ya estaba entrenando esta disciplina y tres meses después gana el nacional y puede viajar a Venezuela como seleccionado nacional juvenil y ganar la medalla de plata para su país.
Iván demostraba, en cada encuentro, dotes increíbles. Por este motivo se posicionó bien es su categoría durante varios años y así pudo viajar a varios países, como a Venezuela en dos oportunidades, Colombia en dos oportunidades y Cuba en dos oportunidades. En este último realizó un curso de cultura física y pedagógica deportiva.
Todo proyectaba que Iván iba ser un gran campeón mundial, pues la Federación le brindaba un apoyo económico para que se dedique a entrenar la lucha olímpica, pero en 1997 ya se realizaban eventos de Vale Todo en Lima y eso lo traía loco a Iván. Quien quería participar pero no podía porque la Federación le tenía prohibido y la sanción era la suspensión de por vida.
Sin embargo, más pudo el instinto que lleva en la sangre y se arriesgó a competir en el circuito de Vale Todo, pero con una máscara para que no lo reconozcan y pudo ganar sus tres combates y llevarse el premio.
Pasado un tiempo, se llevaría a cabo una lucha de Vale Todo, en la Bombonera que es un lugar muy cerca la Federación de Lucha, a pesar de todo Iván decidió participar y sin máscara que le permita ocultar su rostro. Esa misma noche, su público lo bautiza como EL PITBULL porque su estilo era muy parecido a esa raza de perros, por su agresividad, fuerza y demencia de atrapar a la presa y no soltarla.
A raíz de ese enfrentamiento donde resulta ganador, la Federación lo suspende, pero el decide seguir practicando con sus hermanos el Vale Todo. En 1999 Pitbull ingresa a la Universidad La Cantuta ha estudiar Educación Física y ese mismo año funda junto con sus hermanos David y Héctor, La Escuela de Artes Marciales Mixtas Pitbull con el objetivo de formar campeones.
En el 2004 Pitbull y Libia se convierten en padres de Yamileé Iberico, es por eso que ahora tenía más ganas de trabajar y seguir entrenando para sacar adelante a su joven familia, pero no deja de lado su sueño de ir a pelear a Brasil, Japón, USA, sueño que más adelante lo realizaría.
Iván Iberico es el Pitbull de Breña, tiene un record de 35 luchas de Vale Todo, una perdida con el brasileño Flavio Álvaro y 22 luchas de sumisión profesional. Con solo una derrota es considerado el mejor de Perú y uno de los mejores en su categoría de Sudamérica. A pesar de ello, Iván sigue practicando para alcanzar su sueño de ser campeón mundial y convertirse en el número uno del mundo en la categoría 70.
El Pitbull es innato de Breña, nació en el Hospital del niño el 12 de junio de 1978, junto con su hermano gemelo Héctor Max. Y desde ese momento su destino ya estaba escrito, ser un grande en el deporte, así como su abuelo Maximiliano Iberico (boxeador profesional), como su padre David Iberico que practicaba lucha olímpica y sus primos, los atletas profesionales.
Cuando Iván tenía 12 años, las cosas en el barrio Aguarico eran muy difíciles, tenías que saber pelear para defenderte y tenías que ser persistentes para no caer en la tentación de las drogas. Es por ese motivo que su madre decide llevarlo a la Federación de Karate, donde lo practica como dos años.
A los 15 años, su padre lo lleva a presenciar un encuentro en la Federación de lucha Olímpica, fue como amor a primera vista porque al día siguiente ya estaba entrenando esta disciplina y tres meses después gana el nacional y puede viajar a Venezuela como seleccionado nacional juvenil y ganar la medalla de plata para su país.
Iván demostraba, en cada encuentro, dotes increíbles. Por este motivo se posicionó bien es su categoría durante varios años y así pudo viajar a varios países, como a Venezuela en dos oportunidades, Colombia en dos oportunidades y Cuba en dos oportunidades. En este último realizó un curso de cultura física y pedagógica deportiva.
Todo proyectaba que Iván iba ser un gran campeón mundial, pues la Federación le brindaba un apoyo económico para que se dedique a entrenar la lucha olímpica, pero en 1997 ya se realizaban eventos de Vale Todo en Lima y eso lo traía loco a Iván. Quien quería participar pero no podía porque la Federación le tenía prohibido y la sanción era la suspensión de por vida.
Sin embargo, más pudo el instinto que lleva en la sangre y se arriesgó a competir en el circuito de Vale Todo, pero con una máscara para que no lo reconozcan y pudo ganar sus tres combates y llevarse el premio.
Pasado un tiempo, se llevaría a cabo una lucha de Vale Todo, en la Bombonera que es un lugar muy cerca la Federación de Lucha, a pesar de todo Iván decidió participar y sin máscara que le permita ocultar su rostro. Esa misma noche, su público lo bautiza como EL PITBULL porque su estilo era muy parecido a esa raza de perros, por su agresividad, fuerza y demencia de atrapar a la presa y no soltarla.
A raíz de ese enfrentamiento donde resulta ganador, la Federación lo suspende, pero el decide seguir practicando con sus hermanos el Vale Todo. En 1999 Pitbull ingresa a la Universidad La Cantuta ha estudiar Educación Física y ese mismo año funda junto con sus hermanos David y Héctor, La Escuela de Artes Marciales Mixtas Pitbull con el objetivo de formar campeones.
En el 2004 Pitbull y Libia se convierten en padres de Yamileé Iberico, es por eso que ahora tenía más ganas de trabajar y seguir entrenando para sacar adelante a su joven familia, pero no deja de lado su sueño de ir a pelear a Brasil, Japón, USA, sueño que más adelante lo realizaría.
Iván Iberico es el Pitbull de Breña, tiene un record de 35 luchas de Vale Todo, una perdida con el brasileño Flavio Álvaro y 22 luchas de sumisión profesional. Con solo una derrota es considerado el mejor de Perú y uno de los mejores en su categoría de Sudamérica. A pesar de ello, Iván sigue practicando para alcanzar su sueño de ser campeón mundial y convertirse en el número uno del mundo en la categoría 70.
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